Distensión del aductor de la cadera

Los músculos aductores de la cadera a veces se denominan músculos "ingle", y una distensión del aductor de la cadera puede denominarse distensión inguinal. Hay tres músculos ubicados en la parte interna de la pierna.

Las distensiones del aductor de cadera suelen ocurrir cuando los tendones o músculos de la cadera se estiran o desgarran al practicar deportes o ejercicios. En la mayoría de los casos, estas lesiones requieren varias semanas de descanso, medicación y terapia para asegurar la recuperación completa de la distensión antes de poder retomar la actividad física.

Una distensión del aductor se clasifica según su gravedad en grado I, II o III. El grado I suele ser una distensión leve y puede causar dolor hasta por cuatro semanas. El grado III es grave y puede provocar el fin de una temporada deportiva, generalmente representando un desgarro completo del músculo o, en casos graves, una rotura.

Anatomía de la distensión del aductor de la cadera

La cadera es una articulación esférica que conecta el fémur con la cavidad pélvica. Permite el movimiento de la pierna. La articulación de la cadera se compone de varias partes, incluyendo los trocánteres mayor y menor. El trocánter mayor es el punto donde se unen innumerables músculos de los glúteos para promover la abducción y el movimiento lateral de la cadera. En cuanto al trocánter menor, este es el punto donde el músculo psoas ilíaco se une a la articulación de la cadera para permitir el movimiento hacia adelante de la pierna, también conocido como flexión de cadera.

Cómo tratar una distensión del aductor de cadera:

1. Hielo

Aplique hielo en la zona afectada durante 5 a 10 minutos, de tres a cinco veces al día. El hielo ayuda a reducir la hinchazón y la inflamación, lo que a su vez ayuda a minimizar el dolor en la zona.

2. Medicamentos antiinflamatorios

Un medicamento antiinflamatorio ayudará a reducir la inflamación en la articulación afectada. Al reducir la inflamación, disminuirá el dolor en la zona. Consulte con su terapeuta durante cuánto tiempo debe usarlo y si debe tomarlo después de comer. El hielo o el calor pueden ser tan eficaces como los medicamentos.

3. Descansar

El reposo de la zona lesionada, ya sea absteniéndose de hacer actividad física o cambiando a otra actividad que no afecte la cadera, como la natación, es otro componente que ayuda al proceso de curación. Consulte con su terapeuta sobre cuándo puede volver a practicar deporte.

4. Fisioterapia

La fisioterapia es excelente para la rehabilitación de la cadera. Además de ayudar a mejorar la amplitud de movimiento, también ayuda a aumentar la fuerza muscular y a prevenir lesiones innecesarias. Se proporcionarán ejercicios específicos para abordar su nivel individual de lesión y dolor. La electroterapia, como el ultrasonido, el láser o la TENS, también puede utilizarse para acelerar la reparación de los tejidos.

Asegúrese de recibir el tratamiento adecuado, ya que las distensiones inguinales pueden volverse crónicas y causar meses de sufrimiento. El problema tiende a empeorar en la zona superior de la ingle, especialmente donde el músculo inguinal se une a la pelvis mediante un tendón.

Consejos:

• Una vez que el aductor de la cadera haya tenido la oportunidad de sanar, es importante intentar prevenir futuras lesiones. Mejore la fuerza y mantenga la flexibilidad de los aductores de la cadera, los isquiotibiales y los cuádriceps.
• Antes de comenzar cualquier actividad, tómese el tiempo para calentar para ayudar a minimizar el riesgo de lesiones.
• La fisioterapia puede ayudar a fortalecer los músculos de la cadera y prevenir lesiones.
• Dado que cada persona se recupera a un ritmo diferente, es necesario obtener autorización antes de comenzar sus actividades habituales.
• Antes de comenzar con sus actividades normales, debe haber recuperado el rango completo de movimiento y ser capaz de correr, trotar y saltar con la pierna lesionada sin sentir mucho dolor.
• Tenga cuidado con los estiramientos fuertes de los músculos de la ingle. Son pequeños y delicados, y pueden desgarrarse con un simple estiramiento excesivo (como bien sabe el autor).