Lesiones del tendón flexor

Los cortes profundos en la palma de la mano, los dedos, el antebrazo y la muñeca pueden causar daños importantes en los tendones flexores, los tejidos que ayudan a controlar el movimiento de la mano. Las lesiones en el tendón flexor pueden impedir la flexión del pulgar o de los dedos.

Además de cortes en los dedos, el brazo o la mano, ciertas actividades deportivas pueden causar lesiones en el tendón flexor. Estas lesiones son comunes en fútbol, rugby y lucha libre. Cuando un jugador agarra la camiseta de otro y el dedo queda atrapado y tira, se produce el dedo flexor. El tendón se desgarra del hueso.

Ciertas afecciones de salud pueden debilitar los tendones y hacerlos más propensos a desgarrarse. Esto puede ocurrir sin previo aviso o por lesión. Una persona podría notar que su dedo ya no se dobla, pero no recuerda cómo sucedió.

Los tendones se lesionan con mayor frecuencia al atravesar un cristal con la mano. A veces, esto puede ocurrir al caerse o al resbalarse al agarrar un objeto que se rompe y provoca laceraciones en la mano o la muñeca.

Anatomía de las lesiones del tendón flexor

Los tendones son los tejidos que conectan los huesos con los músculos. Cuando los músculos se contraen, los tendones tiran de los huesos. Esto puede provocar el movimiento de diversas partes del cuerpo. Los músculos que mueven el pulgar y los demás dedos se encuentran en el antebrazo. Los tendones largos se extienden desde estos músculos y atraviesan la muñeca para unirse a los huesos más pequeños del pulgar y los demás dedos.

Para ver los tendones flexores, simplemente observe la parte inferior de la muñeca y cierre el puño. Verá los tendones aparecer debajo de la piel: estos son los tendones flexores, tejidos largos y delgados, similares a hilos, que recorren el antebrazo.

Los tendones de la parte superior de la mano, conocidos como tendones extensores, enderezan los dedos. Los tendones de la palma, conocidos como tendones flexores, flexionan los dedos. Al estirar o flexionar el dedo, los tendones flexores se deslizan a través de túneles estrechos, conocidos como vainas tendinosas, que mantienen los tendones en su posición junto a los huesos.

Cómo tratar las lesiones del tendón flexor:

1. Cirugía

Las lesiones del tendón flexor pueden ser graves y suelen requerir cirugía. Tras examinar la mano, podría ser necesario colocarle una férula para proteger la zona. Los tendones no cicatrizan a menos que sus extremos se toquen, lo que no ocurre en casos de desgarro completo. En la mayoría de los casos, los tendones desgarrados o cortados deben ser reparados por un profesional médico, lo que requiere cirugía.

La cirugía suele realizarse entre 7 y 10 días después de la lesión. Generalmente, cuanto antes se realice la cirugía, mejor será la recuperación. Si la lesión restringe el flujo sanguíneo al dedo o la mano, el médico programará una cirugía inmediata.

Tras la cirugía, será necesario un período prolongado de rehabilitación. Esta rehabilitación puede durar varios meses para recuperar la función completa de los dedos. Al principio, la flexión de los dedos será muy limitada, en parte debido a la gran hinchazón e inflamación, y en parte a la necesidad de reeducar/rehabilitar los tendones.

Consejos:

• Los tendones cortados o desgarrados en la muñeca, el antebrazo, la palma o a lo largo del dedo pueden hacer que sea casi imposible doblar una o más de las articulaciones del dedo.
• Dado que los tendones flexores se encuentran cerca de la superficie de la piel, los cortes profundos suelen afectarlos. En estos casos, el tendón suele dividirse en dos.
• Como los nervios de los dedos se encuentran cerca de los tendones, los cortes pueden terminar dañándolos.
• En caso de desgarro parcial, es posible que aún puedas doblar parcialmente el dedo.
• Si no hay suministro de sangre al dedo, será necesaria una cirugía inmediata.