Inestabilidad del tobillo

La inestabilidad de tobillo (a veces conocida como inestabilidad crónica de tobillo) suele caracterizarse por una flexión recurrente de la cara externa del tobillo. Esta afección suele desarrollarse tras un esguince o lesión de tobillo previa. Generalmente, la flexión se produce al caminar (generalmente sobre terreno irregular) o al realizar otras actividades, pero también puede ocurrir al estar de pie. Numerosos deportistas, así como otras personas, pueden padecerla.

El problema principal es el siguiente: cuando te tuerces el tobillo, tienes muchas más probabilidades de volver a torcerlo en el futuro. De hecho, alrededor del 75 % de los esguinces de tobillo son recurrentes. Esto significa que una persona puede sufrir múltiples esguinces de tobillo. Esto se debe a la inestabilidad.

Las personas que padecen esta enfermedad a menudo se quejan de:

• Hinchazón y malestar persistentes
• Sensibilidad o dolor

· Pueden presentarse sensaciones de inestabilidad o tambaleo en el tobillo.

· Giros repetidos del tobillo, especialmente al practicar deportes o caminar sobre una superficie irregular.

Anatomía de la inestabilidad del tobillo

La articulación del tobillo está compuesta por tres huesos diferentes: la tibia, el peroné (hueso más pequeño de la parte inferior de la pierna) y el astrágalo (hueso pequeño situado entre el calcáneo, el peroné y la tibia). Se requieren múltiples ligamentos para garantizar la estabilidad de la articulación del tobillo. Los ligamentos de la parte exterior del tobillo se conocen como ligamento calcáneo-peroneo, ligamento astrágalo-peroneo anterior y ligamento astrágalo-peroneo posterior. Cuando uno o más de estos tres ligamentos se desgarran o rompen tras un esguince grave, puede producirse inestabilidad del tobillo.

Cómo tratar la inestabilidad del tobillo:

1. Fisioterapia y/o Podología

La fisioterapia incluye diversos ejercicios y tratamientos para mejorar el equilibrio, fortalecer el tobillo, mejorar la amplitud de movimiento y reentrenar todos los músculos del pie. En las últimas etapas del proceso de rehabilitación, también podría recibir entrenamiento específico para su deporte o nivel de actividad (rehabilitación funcional).

2. Refuerzo

Algunos pacientes terminan teniendo que usar una férula para brindarle el soporte necesario al tobillo y evitar que se tuerza. La férula también ayuda a evitar esguinces adicionales. Las férulas pueden ser blandas, rígidas o simplemente sujetar el tobillo con una venda para mayor soporte.

3. Medicación

Se pueden recetar medicamentos antiinflamatorios, como el ibuprofeno, para ayudar a reducir la inflamación y el dolor. A medida que disminuye la hinchazón, también disminuye el dolor. Úselo solo por periodos cortos.

4. Cirugía

En ciertos casos, el cirujano podría recomendar una cirugía según el grado de inestabilidad y la falta de respuesta a los tratamientos tradicionales. La cirugía consiste en reparar o reconstruir los ligamentos dañados. El cirujano determinará el mejor procedimiento quirúrgico según su caso particular y la gravedad de la inestabilidad que padezca actualmente. Los tiempos de recuperación variarán según el procedimiento realizado.

Consejos:

1. Los esguinces de tobillo que no se curan adecuadamente son generalmente la principal causa de inestabilidad del tobillo.

2. Cuando se produce un esguince de tobillo, los ligamentos se desgarran o estiran, lo que afecta la capacidad para mantener el equilibrio adecuadamente.

3. Una rehabilitación adecuada es necesaria para fortalecer todos los músculos que rodean el tobillo y reentrenar todos los tejidos internos que afectan el equilibrio. De lo contrario, se producirán esguinces de tobillo recurrentes.

4. Los esguinces repetidos provocan inestabilidad.

5. Cada vez que sufres otro esguince de tobillo, se debilitan aún más tus ligamentos, lo que genera aún más inestabilidad y la posibilidad de desarrollar problemas adicionales en el tobillo.

6. Si este es su primer esguince de tobillo, asegúrese de pasar tiempo con su terapeuta para tener un plan de rehabilitación completo que le ayudará a reducir la probabilidad de sufrir futuros esguinces de tobillo.

Independientemente del tratamiento que elija, es importante tomarse muy en serio la inestabilidad del tobillo, ya que puede empeorar con el tiempo. Consulte con su médico y pregúntele si acudir a un fisioterapeuta es lo adecuado para usted o si simplemente necesita tratarla con ibuprofeno y no estar de pie durante unos días. En cualquier caso, lo importante es atenderla de inmediato.